Como sabéis, de vez en cuando nos gusta detenernos en alguno de los zombis que se generan fruto de los hechos de los capÃtulos de The Walking Dead. La idea de un ser sin raciocinio, que solo tira para delante buscando carne fresca ajeno a todo lo que pase a su alrededor da como resultado sorprendentes propuestas cuando los guionistas son buenos.
En este caso, el Gobernador tira a un hombre muerto al lago con un peso atado al pie, pero sin atravesarle el cerebro (posiblemente a propósito para hacer el experimento). Ello acaba por producir la imagen más sorprendente del capÃtulo.